LOS RETOS DE LA EDUCACIÓN EN SIGLO XXI.
El contexto histórico que la humanidad vive actualmente es muy diferente a medida que su evolución es más vertiginosa. Existen naciones que las condiciones de vida de sus habitantes pueden ser limitadas por carecer de servicios elementales como el agua, seguridad social, educación, alimentación, vivienda propia, etc. Desde hace ya varias décadas el mundo entero se ha percatado el acelerado avance de la tecnología en todos los ámbitos, que puede beneficiar, pero también afectar, ofreciendo un sinfín de recursos de circulación y almacenamiento de información, a lo que lleva a la educación a replantear una doble exigencia, con la transmisión de un amplio volumen de conocimientos teóricos y técnicos, para estar a la altura de las competencias del futuro, no obstante, de acuerdo a las condiciones mencionadas anteriormente esto es una utopía.
Los cuatro pilares de la
educación
De la obra de Jacques Delors, titulado “la educación encierra un
tesoro”, derivado del informe de la UNESCO de la comisión Internacional
sobre la educación para el siglo XXI, recomienda
estructurar la educación entorno a cuatro aprendizajes fundamentales, a los que
llaman también los pilares del conocimiento: aprender a conocer, aprender a
hacer, aprender a vivir juntos, y
aprender a ser.
Aprender a conocer
Este tipo de aprendizaje hace
referencia a la adquisición de conocimientos clasificados y codificados a
partir de los procesos cognitivos de la mente humana. Su propósito es que cada
persona pueda aprender a comprender el mundo que lo rodea, siendo su
justificación el placer decomprender, deconocer, de descubrir. “Si bien el incremento
del saber, que permite comprender mejor las múltiples facetas del propio
entorno”, que favorece la curiosidad intelectual, el sentido crítico y una
autonomía de juicio, permite tener una visión global de la realidad.
El conocimiento es múltiple e
infinitamente evolutivo, resulta cada vez más ilusorio pretender conocerlo
todo, por muchos factores tales como el sistema educativo que impera en cada
nación en particular, obsoletos modelos educativos, una gama de distractores
tecnológicos, la falta de infraestructuras educativas, las condiciones
socioeconómicas de las familias y la falta de formación de los agentes
educativos (docentes, padres de familia, directivos, autoridades políticas),
todo lo anterior lesiona esta misión
propia de la educación. No obstante, las avanzadas economías tienen la mayor probabilidad
de conseguir estos desafíos o pilares de la educación, con la implementación de
una política educativa acorde a las necesidades de sus habitantes, y el resto
de las naciones les corresponde redoblar esfuerzos para poner fin a la pobreza,
proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y
prosperidad, establecidos en los dieciséis objetivos de la agenda 2030 para el
desarrollo sostenible.
Aprender a hacer
Las personas una vez que han
aprendido a conocer, el siguiente paso es poner en práctica los conocimientos
adquiridos de acuerdo a los objetivos educacionales y por el curriculum oculto,
estos conocimientos son utilizados en las actividades cotidianas, así como también
integran la formación profesional que permite actuar las competencias de las
personas en el mercado de trabajo.
La educación debe ser considerado
como transcendental para el ser humano no solo para el ámbito laboral sino para
la vida, no obstante, los modelos educativos en el mundo están diseñados para
generar mano de obra para los países hegemónicos o desarrollados, que tiene
propósitos mercantiles y su finalidad es generar trabajadores para la industria
manufacturera, y no personas propositivas, críticas y reflexivas.
Los países desarrollados o
economías avanzadas como Estados Unidos, Canadá, Alemania, etc., en sus
acuerdos bilaterales exigen a las naciones donde tienen concesiones y plantas
industriales, les adopten modelos educativos para la formación técnica y especialidades
de las personas que requieren. Es por es
que la gobernancia juega un papel importante en la naciones, donde mantienen un
vínculo estrecho entre los gobiernos locales y la iniciativa privada.
Aprender a vivir juntos
En el mundo impera una atmósfera
competitiva imperante en la actividad económica de cada nación y, sobre todo, a
nivel internacional, tiende además a privilegiar el espíritu de competencia y
el éxito individual, esto conlleva una sensible línea que termina en la
rivalidad entre las personas o hasta las naciones de acuerdo con sus ventajas
competitivas, ejemplo de ello se encuentran Ucrania y Rusia, la guerra
comercial entre China y Estados Unidos, por mencionar algunos. Sin embargo, la educación
como la esperanza de la humanidad, además de impartir un cumulo de
conocimientos debe de fomentar la adquisición de una cultura universal, donde
permita que las y los niños desde temprana edad conozca otras costumbres,
tradiciones, lenguas, religiones, etc., así como también fomentar los valores
universales como el amor, el respeto, la responsabilidad, la honestidad, etc.,
y sobre todo la cultura la de la paz.
La educación debe emprender
proyectos comunes en el sistema educativo, para tener una conciencia
humanística y una visión global, verbigracia, el cambio climático. Fomentar el
trabajo colaborativo es importante en cualquier organización social, la empatía
y el esfuerzo conjunto de las personas que integran el equipo de trabajo es
fundamental para lograr los objetivos trazados.
Aprender a Ser
Es importante que una persona en
toda su trayectoria de aprendizaje obtenga las condiciones cognoscitivas ineludibles
que permitan dotarse de un pensamiento autónomo y crítico y de elaborar un
juicio propio, para determinar por sí mismos qué deben hacer en las diferentes
circunstancias de la vida.
La educación es pues la clave de
la transformación de las sociedades, y es la responsable de dotar a cada
persona de las fuerzas y puntos de referencia intelectuales permanentes que le
permitan comprender el mundo que le rodea y comportarse como un elemento
responsable y justo. Más que nunca, la función esencial de la educación es
conferir a todos los seres humanos la libertad de pensamiento, de juicio, de
sentimientos y de imaginación que necesitan para que sus talentos alcancen la
plenitud y seguir siendo artífices, en la medida de lo posible, de su destino.
La educación del siglo XXI debe
otorgar a las y los niños una formación integral además de ofrecer
conocimientos científicos (ciencias exactas, naturales, experimentales y
sociales), así como también impartir la formación humanista y de las ciencias
del alma (las artes, deporte, la cultura, etc.), para que la educación coadyuve
a la constante maduración de la personalidad de cada individuo, lograr una
experiencia profesional positiva, que la educación permita la autorrealización
de las personas, es, pues, un proceso extremadamente individualizado y una
estructuración social interactiva.
En nuestros días, representa un
gran reto para educación lograr en cada habitante de cualquier parte del mundo el
desarrollo de todos los pilares de la educación, en gran medida dependerá del
esfuerzo de los gobiernos y de las organizaciones sociales, para que las
personas puedan ser protagonistas en los contextos en donde se desarrollan.
El mundo entero hoy enfrenta un
problema de salud con la aparición del nuevo coronavirus Sars Cov 2 (Covid 19),
donde las naciones tomaron como medida sanitaria el confinamiento social, para
mitigar el incremento de los contagios, este trajo consigo repercusiones económicas
en todo el mundo. La educación dejo de ser presencial y adoptó la enseñanza en línea,
esto complicó aún más el acceso a la
escuela, ya que muchos países latinoamericanos no tienen una infraestructura tecnológica
educativa, el servicio de internet no es gratuita y el nivel socioeconómico de
los agentes educativos no es suficiente, por otra parte, los países desarrollados
que ya habían incursionado con las plataformas educativas pudieron salir a
flote, no obstante, los docentes de manera independiente tuvieron la iniciativa de elegir varias las
alternativas en las redes sociales y de los medios de comunicación masiva para
poder llevar a cabo su labor. La educación entró a un retroceso porque la
impartición de los objetivos educacionales fue complicada de aterrizar en todos
los niños y jóvenes, por las condiciones económicas desfavorecidas de cada uno
de ellos, esto trajo como consecuencias en alto índice de abandono escolar, lo
que permitió el descenso de las matrículas escolares.
¿Cómo alcanzar los objetivos de la
comisión de la UNESCO en tiempos de pandemia? ¿Es factible aprender a conocer
todo cuando los accesos a la educación son limitados? ¿Qué medidas están implementando
los que integran la comisión para que las redes sociales y medios de
comunicación estén al alcance de las personas? ¿De qué manera la comisión está
regulando el uso responsable del internet, así como de otros medios de comunicación
y las redes sociales? ¿Cuál es la estrategia de la comisión para ofrecer contenidos
idóneos en todos los medios de comunicación masiva para el desarrollo cognitivo
de las personas?
No cabe duda que estos cuatro
pilares de la educación: Aprender a conocer, Aprender a hacer, Aprender a vivir
juntos y aprender a Ser, es una estructura ideal para la educación, sin
embargo, lograrlo requiere del esfuerzo, una visión progresista, amplia y consciente
de los gobernantes, para poder reconocer el nivel educativo que atraviesa el
contexto geográfico que le compete, para así buscar alternativas de cambio. Es necesario
la implementación de modelos educativos con enfoques humanistas que ofrezca una
educación para la vida misma, no es solamente aprender a conocer un sinfín de ciencias,
sino aprender a reconocer las potencialidades de uno mismo para alcanzar el
aprender a Ser.
Mtro. Juan Gómez Santiago
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